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La Malva sylvestris es una planta originaria de Europa, la cual se puede encontrar dentro de la mayor parte del continente, exceptuando Islandia, el norte de Escandinavia y el norte de Rusia. De igual modo es una planta procedente tanto de Asia occidental como del norte de África.
Sin embargo y en Sudamérica, dentro de las regiones templadas entre las que se encuentran Argentina, Uruguay y Chile, es igualmente posible conseguir la Malva sylvestris como adventicia y ser bastante común.
Características
De la misma forma cabe mencionar que la malva es una planta realmente común no solo dentro de solares abandonados y descampados, sino también en sembradíos y márgenes de caminos, al igual que en herbazales y riberas.
Por lo general, la Malva sylvestris se encuentra vinculada con la presencia de animales domésticos y ganado, debido a que posee una naturaleza nitrófila, lo que significa que esta planta se beneficia a través de la abundancia de nitrógeno que obtiene de los excrementos de dichos animales.
La malva se caracteriza por ser una planta perenne, herbácea o bienal, la cual pertenece a la familia compuesta por las malváceas.
Pueden tener tamaños bastante variables, por lo que se pueden encontrar malvas con una altura de alrededor de 20-150cm. Esta planta suele tener numerosas ramas y una estructura erecta, aunque en ciertos casos se encuentra tumbada.
Cuenta con hojas de gran tamaño que poseen una forma palmeada y se dividen en cinco lóbulos dentados. Sus flores destacan por su gran belleza, ya que están formadas por pétalos escotados de un tono purpura o rosa, los cuales, se encuentran atravesados con venas muy finas de un color más oscuro.
Su fruto es una nuez fuertemente reticulada que por lo general se encuentra libre de pelos, sus semillas poseen forma de rueda de queso y son de un tono que varía entre marrón y verde pardusco al alcanzar la madurez.
La floración de la Malva sylvestris destaca por ser prolongada y constante, comenzando entre febrero y marzo, pero de acuerdo a las condiciones de humedad se puede extender hasta muy entrado el mes de octubre.
Estas flores brotan en grupos axilares compuestos por dos o cuatro. Es preciso decir que aunque esta planta tiene una apariencia realmente agradable al empezar a florecer, con la llegada del verano sus hojas suelen perder su color y sus tallos toman un aspecto irregular.
En la parte posterior de los pétalos de sus hojas cuentan con vetas arrugadas, dándole forma de huevo y delimitando un margen a través de una franja de proyecciones que poseen forma de pelos. Además, posee 10 carpelos anchos que se presentan en racimos axilares, al igual que estambres los cuales brotan desde el centro y poseen pelos suaves y cortos.
Cultivo
Cuando se trata del cultivo de esta planta, resulta necesario tener en cuenta lo que se menciona a continuación:
Las semillas tienen la capacidad de mantener su poder germinativo durante aproximadamente unos tres años, de modo que lo más conveniente suele ser usar las semillas obtenidas con la cosecha del año previo.
Debido al pequeño tamaño que tienen las semillas de la Malva sylvestris es posible que lo más recomendable sea sembrarlas dentro de un vivero para después trasplantarlas a un campo definitivo y/o sembrarlas en éste de forma directa.
Al optar por el vivero, existe la posibilidad de llevar a cabo la siembra cuando finalice el invierno, de modo que se puedan trasplantar plántulas en el campo una vez que tengan el tamaño apropiado.
Su siembra directa se puede llevar a cabo al principio de la primavera. Resulta esencial que la densidad de plantación sea de aproximadamente 50.000 plantas por metro cuadrado.
Cuidados
Los cuidados básicos de la Malva sylvestris consisten básicamente en la eliminación de las carpidas y malezas, sin embargo es preciso tener en cuenta lo siguiente:
El riego de la malva tiene que ser realizado únicamente cuando sea preciso, lo cual por lo general suele ser en el momento de realizar el trasplante. El clima más apropiado para el correcto desarrollo de esta planta suele ser el clima templado, aunque también puede crecer en clima de montaña o templado-cálido.
Cuando se trata de suelos, la malva no es una planta exigente por lo que puede crecer fácilmente en numerosos tipos de terrenos, aunque los más adecuados son aquellos permeables y de consistencia media. Además, es igualmente prospera al ser sembrada en suelos arenosos, siempre que se encuentren provistos apropiadamente de materia orgánica.
Como ya hemos mencionado anteriormente, la Malva sylvestris suele crecer en praderas nitrófilas, bordes de caminos, terrenos removidos, baldíos, etc., y aunque es una planta proveniente de Europa, después se extendió hacia Asia occidental y el norte de África.
Además se ha extendido hasta América del Norte considerándola una especie invasora, al igual que en el este de Australia. De igual forma, en Macaronesia es posible hallarla tanto en las Azores, como en Madeira.
Usos de la Malva
A esta planta se le atribuyen varios usos, entre ellos destacan los que se mencionan a continuación:
A la Malva sylvestris le son atribuidos diversos usos para la salud, por lo que se suelen cosechar no solo sus hojas, sino también sus flores al llegar al punto álgido de su floración. En este sentido, la planta destaca por que cuenta con un gran contenido de mucílagos, por lo que resulta ideal para tratar distintas clases de irritaciones debido a las propiedades que posee, como por ejemplo: laxante y emoliente.
Al ser utilizada de forma externa, a modo de cataplasmas o compresas, permite tratar irritaciones cutáneas como acné, eccemas y furúnculos, entre otras cosas.
Preparar una infusión de malva es ideal para combatir problemas bucales y de garganta al realizar gargarismos y/o enjuagues. Asimismo y debido a sus propiedades expectorantes y antitusígenas, el té de malva permite tratar afecciones pulmonares como el asma, la tos y la bronquitis e igualmente, alivia el estreñimiento al actuar como un suave laxante.
En la antigüedad la malva era cultivada como planta alimenticia, por lo que de ella suelen ser común el consumo de sus brotes tiernos como parte de ensalada, y sus hojas (libres de tallos y cocidas) como verdura.
Como planta comestible posee un sabor bastante ligero, por lo que normalmente se usa como acompañamiento para otros alimentos.
Antiguamente las flores solían extenderse hacia las puertas, por lo que era común tejer guirnaldas con el fin de celebrar el Primero de Mayo. Hoy en día, su uso decorativo puede ser tanto en el interior como en el exterior de los hogares, debido a que posee una apariencia muy agradable y llamativa.
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